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Gobierno interno

Estamos comprometidos a desempeñarnos con integridad, 
respetando prácticas sólidas de gobierno interno.

Fuimos la primera institución financiera y una de las primeras empresas públicas en Canadá, en crear una Oficina de Gobierno Interno. Scotiabank toma al gobierno interno con mucha seriedad. Abordamos las prácticas de gobierno interno no solo de la Junta Directiva matriz sino también las de nuestras subsidiarias en todo el mundo, y trato directamente con nuestras juntas directivas en todo el mundo. Como el banco más internacional de Canadá, creo que eso es único. Además, estoy bajo la supervisión del Presidente del Junta Directiva y del Asesor General. Esta estructura desempeña una función clave en las relaciones entre la Junta Directiva, la Alta Dirección y la comunidad más amplia de partes interesadas, y expresa la visión de nuestra Junta Directiva sobre la importancia del gobierno interno.

Cuando uno mira al pasado y observa las diversas crisis que se han producido como resultado de gobiernos internos deficientes, es claro que las prácticas de gobierno interno robustas y sustanciales contribuyen al éxito a largo plazo de una empresa. Un gobierno interno eficaz produce una gran influencia en la dirección y la cultura de una organización, además de provocar un efecto formidable en las comunidades donde opera la empresa, e incluso, en la economía en general.

El gobierno interno en Scotiabank siempre tiene la mirada puesta en el futuro. Pensamos más allá de cumplir con los requisitos o expectativas de los organismos reguladores y de los accionistas, y siempre buscamos formas de mejorar cómo hacemos las cosas en el Banco. Por ejemplo, observamos de cerca la forma en que la Junta Directiva conduce la empresa, pero también tenemos en cuenta cómo la Junta Directiva se administra a sí misma. Trabajando estrechamente con la Alta Dirección, la Junta Directiva y las juntas directivas de nuestras subsidiarias globales, el área de gobierno interno ayuda a que el Banco avance hacia una dirección estratégica sólida.

Un buen gobierno interno exige una perspectiva a largo plazo, y esa perspectiva a largo plazo siempre se basa en mejorar el futuro. Un marco, principios y prácticas de gobierno interno eficaces se prestan increíblemente bien para mejorar el futuro de todos, inclusive el de nuestros accionistas, clientes, comunidades, empleados y todos aquellos con quienes nos relacionamos como banco global.